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EVANGELIO DEL DIA : Vilma Isabel Melgarejo A.

Manantial de vida. Shekina

día 6 de febrero de 1993 después de la adoración al Santísimo, salimos de la capilla a ensayar algunos cantos a la Virgen. Al final del pasillo.

A eso de las 7:20 p.m., nos llamó la atención como unos relámpagos de color azul en el jardín. Al instante, todos vimos claramente a la Santísima Virgen María sobre una mata de cambur (guineo), a unos cuantos metros de distancia, de donde nos encontrábamos.

Se movía, abría las manos y levantaba los ojos al cielo, la vimos bajo diferentes advocaciones.

Su figura, de tamaño natural y muy resplandeciente, iluminaba todo el bosque con luz blanca y azul muy tenue.

Una hermana que dudaba, al querer acercarse para asegurarse de lo que veía, sintió una voz que le dijo: "No lo hagas".

Luego, la Virgen pidió a esta misma hermana que nos arrodilláramos porque nos iba a bendecir. Vio como se puso de rodillas, levantó sus manos y bendijo a los presentes.

Seguimos rezando y de repente vimos desprenderse una estrella del manto de la Virgen, que cayó en tierra.

La Virgen estuvo allí hasta las 5:45 a.m., del día 7 de febrero.

A las 11:00 a.m. de ese día, sin hacer ningún comentario nos acercamos al sitio y pudimos ver que todo estaba cubierto de escarcha plateada.

Al día siguiente en la limpieza de la casa se encontró escarcha de todos colores en el piso, cuartos, paredes, etc. y las rejas con un polvo plateado como el que se vio en el bosque.


El día 19 de febrero apareció de nuevo, observamos cómo las estrellas pasaban delante de Ella desprendiéndose y dejando su estela al desaparecer, otras titilaban lentamente como si el firmamento se volcara sobre Ella. Terminó su mensaje diciendo:

"Esta es mi Advocación, VIRGEN MARIA, MADRE DE LAS ALMAS CONSAGRADAS. OS TENGO EN MI CORAZON".

Esta vez estuvo hasta las 4:30 a.m. del día 20/02/93.

El fenómeno de las escarchas se fue extendiendo a las casas y comunidades religiosas como señal de su presencia que había prometido en mensaje privado dado el día 9 de febrero de 1993.

Desde esta fecha Ella misma se encargó de dar a conocer su aparición a otras comunidades y congregaciones cuyo testimonio se encuentra escrito.

Hasta esa fecha, sus mensajes han sido para las almas consagradas (sacerdotes y religiosas).


El día 23 de diciembre en el mensaje núm. 10, expresó:

"Hijitos... hijitas, en todos los lugares de mis apariciones llegáis buscándome con los ojos del cuerpo, no con los del alma y del corazón y esto hace que se disipe vuestro corazón y no permita el recogimiento interior. Si no me veis con los ojos del alma y del corazón cómo me veréis realmente con tan poca fe. Si disipáis vuestros espíritus impedís sentirme a vuestro lado y en vuestro corazón "


En el mensaje núm. 11, explicó su Advocación:

"Hijitos... hijitas, con qué amor y alegría os doy a conocer mi advocación, para que la deis a conocer, llenos de mi amor, al mundo entero"

"Hijitos míos: mi corona de espigas, representa la Eucaristía, que es alimento y centro de vuestras vidas.

Mi vestido blanco con estrellas, la luz que a través de Mí, brilla para vosotros.

Mi rosario, cadena que os ata a mí, camino que os lleva al cielo.

El corazón representa a todas mis almas consagradas. La cruz que sale de él es la entrega incondicional de vuestras vidas.

Los rayos son las gracias que, a través de Mí, mi hijo Jesús derrama sobre vosotros.

Mi hijo Jesús, con los brazos extendidos y mirada fija en vuestra entrega, os recibe a todos unidos en un sólo corazón. OS CUBRO CON MI MANTO"


El 6 de febrero de 1994, al cumplirse el primer aniversario de su aparición, manifestó:

"Hijitos... hijitas, tomad a mis más pequeños y en unión con vosotros venid a mi puerto de salvación todos los viernes y entrad en recogimiento y oración y celebrad el sacrificio de mi hijo amado y orad por mis intenciones. Os tengo en mi Corazón."

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